domingo, 16 de septiembre de 2018

Tarta de Santiago


La tarta de Santiago, en cualquiera de sus versiones, es siempre un acierto. Cuando necesito un dulce para llevar a algún evento, es la primera preparación que acude a mi cabeza porque es rápida y deliciosa, ligera y aromática a más no poder. Por todas estas razones he pensado que querrías saber cómo hacer una Tarta de Santiago sin complicaciones.

Con mi especial gusto por cambiar las cosas de lugar, la naturaleza de los ingredientes no escapa a esta compulsión. Hoy me encontraba en la tesitura de querer hacer la Tarta de Santiago para llevar a casa de una amiga que es celíaca; quizá por esta razón  ha sido un acierto, pues esta tarta es principalmente almendra; como tiene muy poca cantidad de harina común, el cambio no ha supuesto ningún desafío del otro mundo: tan sólo sustituir harina de trigo por maizena :) ¡Ni se ha enterado la masa!

Inspirada en la receta original Thermomix que aparece recogida en  el libro general que acompañaba a la Thermomix 21, mi gran compañera hasta que ha dejado de funcionar correctamente, me atrevería a decir que es más rápida y menos exigente si cabe que un bizcocho de yogur. Así que si eres de tener la alacena bien dotada, no encontrarás problemas para hacerla cuando te parezca.


Tarta de Santiago

Precalentar horno 180ºC
Molde 28cm, paredes bajas.
Cocción 15' a 18' dependiendo del horno. 

Ingredientes


-200 gr de almendras crudas molidas (enteras si tienes opción de molerlas en el momento)
-175 gr azúcar glas
-ralladura de 1 limón
-3 huevos enteros + 2 yemas
-40 gramos de mantequilla reblandecida
-40 gr de maizena / harina de trigo
-2 cdta de levadura química
-1 cdta de sal
-azúcar glass para decorar


Comenzamos mezclando la harina de almendra, ralladura de limón y el azúcar glaseado. Yo personalmente, en esta ocasión, he elegido almendras molidas con piel, que son de uso común aquí en Suiza, tan solo por ver la diferencia con la almendra marcona que suelo emplear para esta preparación, y que suelo moler en el momento. El resultado, como veréis más abajo, es una miga más oscura y un sabor menos intenso debido, principalmente al tipo de almendra (pero esto yo ya lo sabía jjj).

Añadimos huevos, yemas y mantequilla en pomada o reblandecida en el microondas unos segundos, batiendo hasta incorporar completamente.

Agregamos la harina o la maizena, sal y levadura. Mezclar suavemente hasta integrar.

En un molde debidamente preparado con papel o spray antiadherente (o cualquier método que suelas utilizar), vertemos la mezcla y horneamos por espacio de 15' aproximadamente.

Siempre es bueno comprobar con un palillo antes de extraer del horno; luego, dejar enfriar y espolvorear con azúcar glass. Para esto me fabriqué yo hace muchos años una plantilla con forma de concha para ilustrar el tema de la tarta.




Por último, ya sabéis que soy amiga de ofrecer alternativas y visiones varias, así que os dejo aquí enlace al artículo divino y completo de Webos fritos, donde podéis disfrutar de datos, historia y cultura, además de una versión más purista  de la Tarta de Santiago, que me muero por probar.

Espero que la disfrutéis! Gracias por leer y por compartir.
Mariví xxx. 







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